Foto: Pro Football Hall of Fame
Orenthal James Simpson, conocido popularmente como O. J. Simpson, murió el miércoles, 10 de abril, a sus 76 años de edad, según informó su familia este jueves. Su vida estuvo llena de reflectores por múltiples motivos, tanto positivos como negativos.
Simpson llamó la atención por primera vez jugando en la National Football League (NFL) de Estados Unidos, siendo uno de los deportistas más reconocidos de este deporte en su país durante la década de 1970.
Durante la campaña de 1973 se convirtió en el primer jugador en superar la cifra de las dos mil yardas corridas en una temporada, y en 1985 entró al Salón de la Fama de la NFL.
Sin embargo, el momento en el que las cámaras estuvieron más presentes en su vida fue tras su captura y posterior juicio por el asesinato de su exesposa Nicole Brown y el de su amigo Ronald Goldman, en junio de 1994. Este fue uno de los eventos más vistos por los estadounidenses en la historia de la televisión, arruinando su reputación.
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Simpson fue absuelto en primera instancia en 1995, pero en 1997 un tribunal civil lo declaró culpable, condenándolo a pagar más de 33 millones de dólares. No los pagó. En 2007 fue condenado a prisión por otro delito de secuestro, saliendo en libertad condicional en 2017, y cumpliendo con ella en 2021.
O. J. Simpson falleció por cuenta de un cáncer de próstata, enfermedad que se conoció este año que padecía, aunque ya en diciembre de 2023 había anunciado un diagnóstico de cáncer, sin indicar de cuál se trataba.