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El Departamento de Salud (DS) de Puerto Rico ha informado del primer fallecimiento por dengue en lo que va del año. La víctima, un hombre de 85 años, marca el inicio de una situación crítica en la isla caribeña. Hasta la fecha, se han notificado 1.033 casos de dengue, entre probables y confirmados, lo que representa el 80% de los casos reportados en todo 2023.
El reciente informe sanitario revela que 69 de los 78 municipios de Puerto Rico han registrado al menos un caso de dengue, con una concentración significativa en la zona metropolitana. Bayamón, Carolina y San Juan son los municipios más afectados, concentrando el 60% de los casos totales, según Melissa Marzán, la principal oficial de epidemiología.
Marzán explicó que el primer contagio de dengue suele ser asintomático, pero una segunda infección puede generar síntomas severos. Ante este incremento alarmante de casos, el secretario del DS, Carlos Mellado, declaró una epidemia de dengue el pasado 25 de marzo, con el objetivo de garantizar los recursos necesarios para la vigilancia, detección, prevención y control de la enfermedad.
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Las autoridades de salud han emitido recomendaciones para prevenir la propagación del dengue. Entre las medidas sugeridas se incluye la eliminación de criaderos de mosquitos, inspeccionando y eliminando cualquier recipiente o área donde el agua pueda acumularse. También se aconseja el uso de repelentes de insectos, vestir ropa que cubra la piel y considerar la instalación de mosquiteros en camas y tela metálica en puertas y ventanas.
El dengue es una enfermedad que afecta a personas de todas las edades y se presenta con síntomas que varían desde fiebre leve hasta fiebre incapacitante, acompañada de dolor intenso de cabeza, dolor detrás de los ojos, dolor en músculos y articulaciones, y eritema.
La declaración de epidemia subraya la necesidad de una acción inmediata y concertada para controlar la propagación del dengue y proteger la salud de los residentes de Puerto Rico.
