En la noche del domingo 6 de marzo, el petróleo Brent alcanzó los 139 dólares, teniendo así, su mayor fluctuación desde la fuerte crisis financiera en 2008. Esto se da luego de que Estados Unidos considerara prohibir las importaciones de crudo ruso debido al conflicto con Ucrania.
El lunes 7 de marzo, el petróleo cotizaba a 124,09 dólares en el mercado de futuros de Londres, intensificando las posibilidades de un gran impacto en la economía mundial.
JP Morgan Chase & Co comunicó que el Brent podría llegar al finalizar el año a los 185 dólares por barril, mientras que un fondo de cobertura dijo que incluso 200 dólares por barril era una posibilidad.
