
El 28 de septiembre de 2022 la Superintendencia de Salud tomó la decisión de darle cuatro meses más de oxígeno a la E.P.S de los antioqueños Savia Salud para que se capitalice y pueda sanear sus finanzas. El plazo se cumple a finales de enero y será decisivo para que se tome la determinación si se liquida o no.
Savia Salud se creó con el propósito de atender a las personas más vulnerables del departamento. De acuerdo a la gerente del régimen, Lina Bustamante, “Savia tiene 1´673.493 afiliados, 92% pertenece a régimen subsidiado y el restante al contributivo. El 43% de los afiliados está concentrado en el Valle de Aburrá”.
En el periodo de vigilancia de la Supersalud, destacó que desde enero a septiembre, el ente regulador recibió “25.778 peticiones, quejas y reclamos contra Savia Salud por fallas en la atención a los usuarios, de las cuales 9.603, es decir el 37,2 por ciento, corresponden a riesgo de vida”.
La ministra de Salud Carolina Corcho, aseguró que la situación ´Savia´ se debe revisar con lupa pues el traslado de esa cantidad de usuarios a una entidad prestadora de Salud, puede representar un descalabro financiero y de atención.
Corcho ha sido insistente en someter a una reforma al sistema de salud, por considerarlo “perverso” en la forma como manejan los recursos y la liquidación de más de 14 EPS en cuatro años.
A finales de septiembre de 2022, la deuda de Savia Salud sumaba 579.647 millones. Se espera que antes de finalizar enero, se muestre una recuperación e inyección de capital de los socios de la E.P.S