Foto: Gobierno de México
Cinco días después de que la Policía de Ecuador irrumpiera en las instalaciones de la Embajada de México en el país, el Gobierno mexicano radicó ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) una demanda en contra de Ecuador.
De acuerdo con la canciller mexicana, Alicia Bárcena, esta demanda pretende llevar a Ecuador “a rendir cuentas por la flagrante transgresión a la inviolabilidad de nuestra embajada y ataques a nuestro personal”. Según recogió la demanda la CIJ, México solicitó “suspender a Ecuador como miembro de las Naciones Unidas” y otras cuatro medidas provisionales.
Entre ellas, se espera que “Ecuador adopte medidas apropiadas e inmediatas para brindar plena protección y seguridad a las instalaciones diplomáticas, sus bienes y archivos, evitando cualquier forma de intrusión en su contra”. Además, “que el Gobierno del Ecuador permita al Gobierno mexicano desalojar los locales diplomáticos y la residencia privada de los agentes diplomáticos”.
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El Gobierno mexicano también buscará “que el Gobierno del Ecuador vele por que no se adopten medidas que puedan perjudicar los derechos de México respecto de cualquier decisión que la Corte dicte sobre el fondo; y que se abstenga de realizar cualquier acto o conducta que pueda agravar o ampliar la controversia que conoce de la Corte”.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que lo más importante es “la no repetición”, además de la denuncia “del agravio” a México y su personal diplomático en este evento de la noche del viernes 5 de abril.
Además, el mandatario explicó que la petición de suspender a Ecuador de la ONU debería ser efectuada hasta que “no haya una disculpa pública, un compromiso de no repetición y la reparación de los daños.