Foto: Cuentas de X de Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) y de Irfaan Ali (@presidentaligy)
El domingo, 3 de diciembre, se llevó a cabo un referéndum en Venezuela en el que los venezolanos debían votar sobre cinco puntos que permitirían la anexión de la región del Esequibo por parte de Venezuela. Desde Guyana, república soberana de este territorio en disputa, rechazan las acciones lideradas por Nicolás Maduro.
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El régimen de Maduro lleva meses liderando las estrategias políticas y administrativas para hacer de forma contundente la reclamación del territorio que se encuentra en disputa desde hace más de 150 años. Finalmente, resolvió realizar un referéndum que lo “avalaría” para anexarse esta región.
El presidente de Guyana, Irfaan Ali, ha rechazado enérgicamente las intenciones de Venezuela de tomar control administrativo y militar de este territorio, el cual ocupa unos dos tercios del área total del país. El mandatario alega que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) respeta una medida judicial de 1899 que le otorga total soberanía del territorio.
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Nicolás Maduro, sin embargo, ha rechazado la presencia de la CIJ frente a esta determinación, puesto que corresponde a una decisión autónoma de Venezuela. La Corte ha determinado que, mientras se lleva a cabo una decisión final del caso, “la República Bolivariana de Venezuela se abstendrá de realizar cualquier acción que modifique la situación que actualmente prevalece en el territorio en disputa, por el cual la República Cooperativa de Guyana administra y ejerce control sobre esa área”.
Ambos presidentes han tomado ya medidas poderosas para la defensa del territorio. El mandatario de Guyana dio luz verde para que el Comando Sur de los Estados Unidos haga presencia en el territorio en disputa, según denunció la Cancillería venezolana. Venezuela, por su parte, y por orden de Maduro, creó comités de Defensa de la Guayana Esequiba, enviando tropas, publicando y distribuyendo un nuevo mapa del territorio nacional y aprobando planes de explotación petrolera en esta zona.
