Cortesía: UNFPA
El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) publicó el último informe sobre el Estado de la Población Mundial, resaltando los notables avances alcanzados en los últimos 30 años en cuanto a compromisos globales relacionados con la salud y los derechos sexuales y reproductivos.
Entre los logros destacados se encuentran la reducción de casi un tercio en las tasas de mortalidad materna, el incremento del número de mujeres que usan métodos anticonceptivos modernos, así como la aprobación de leyes contra la violencia doméstica en más de 160 países.
A pesar de estos avances, el informe revela que las mejoras han tenido poco impacto en los más pobres y marginados del mundo, quienes siguen enfrentando barreras significativas para ejercer sus derechos y opciones. El UNFPA señala que estas disparidades están profundamente arraigadas en la desigualdad y la discriminación, a menudo presentes de forma encubierta en los sistemas de salud e instituciones.
Por ejemplo, en toda América, las mujeres afrodescendientes tienen mayores probabilidades de morir durante el parto en comparación con las mujeres blancas, con una tasa tres veces superior a la media nacional en Estados Unidos. Del mismo modo, las mujeres pertenecientes a grupos étnicos indígenas enfrentan un mayor riesgo de mortalidad relacionada con el embarazo y el parto.
Los expertos destacan la necesidad de visibilizar estas desigualdades para poder diseñar políticas adecuadas que aborden estas disparidades y promuevan la equidad en el acceso a la atención médica y los derechos reproductivos.
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